Luces, cámara… Amor

Si a Amanda le hubieran preguntado de pequeña dónde se veía en el futuro, habría respondido sin dudar que se imaginaba convertida en una actriz de fama mundial, rodeada de lujo y casada con el hombre más atractivo del mundo. Sin embargo el futuro nos alcanza a todos tarde o temprano, y la realidad es muy distinta: Amanda apenas es reconocida en su barrio por ser la protagonista de una pequeña obra de teatro; vive de alquiler en un piso minúsculo que comparte con su madre separada; y el único hombre de su vida es su obeso e insoportable casero. A estas alturas cualquier persona sensata ya habría renunciado a sus sueños y buscado la estabilidad. Pero Amanda nunca se ha caracterizado por ser una persona sensata, y sigue a la espera de su destino mientras malvive con el sueldo de odiosos empleos temporales. Todo cambia cuando le ofrecen un puesto como instructora de interpretación. Lo que a simple vista parece un pequeño avance en su carrera, se transformará en la oportunidad de su vida. Y todo gracias a uno de sus alumnos; un hombre misterioso que resultará ser mucho más de lo que aparenta y que transformará todos sus sueños en realidad.